El níquel se alea fácilmente con la mayoría de los metales como el cobre, el cromo, el hierro y el molibdeno.La adición de níquel a otros metales altera las propiedades de la aleación resultante y se puede utilizar para producir las características deseadas, como una mejor resistencia a la oxidación oa la corrosión, un mayor rendimiento a altas temperaturas o menores coeficientes de expansión térmica, por ejemplo.
Las siguientes secciones presentan información sobre cada uno de estos tipos de aleaciones de níquel.
Aleaciones de níquel-hierro
Las aleaciones de níquel-hierro funcionan en aplicaciones donde la propiedad deseada es una baja tasa de expansión térmica.Invar 36®, también vendido con los nombres comerciales de Nilo 6® o Pernifer 6®, presenta un coeficiente de expansión térmica de aproximadamente 1/10 del acero al carbono.Este alto grado de estabilidad dimensional hace que las aleaciones de níquel-hierro sean útiles en aplicaciones tales como equipos de medición de precisión o varillas de termostatos.Otras aleaciones de níquel-hierro con concentraciones aún mayores de níquel se utilizan en aplicaciones donde las propiedades magnéticas blandas son importantes, como transformadores, inductores o dispositivos de almacenamiento de memoria.
Aleaciones de níquel-cobre
Las aleaciones de níquel-cobre son muy resistentes a la corrosión por agua salada o agua de mar y, por lo tanto, encuentran aplicación en aplicaciones marinas.Como ejemplo, Monel 400®, también vendido bajo los nombres comerciales Nickelvac® 400 o Nicorros® 400, puede encontrar aplicación en sistemas de tuberías marinas, ejes de bombas y válvulas de agua de mar.Esta aleación tiene una concentración mínima de 63% de níquel y 28-34% de cobre.
Aleaciones de níquel-molibdeno
Las aleaciones de níquel-molibdeno ofrecen una alta resistencia química a los ácidos fuertes y otros reductores como el ácido clorhídrico, el cloruro de hidrógeno, el ácido sulfúrico y el ácido fosfórico.La composición química de una aleación de este tipo, como la Aleación B-2®, tiene una concentración de molibdeno de 29-30% y una concentración de níquel de entre 66-74%.Las aplicaciones incluyen bombas y válvulas, juntas, recipientes a presión, intercambiadores de calor y productos de tubería.
Aleaciones de cromo-níquel
Las aleaciones de níquel-cromo son apreciadas por su alta resistencia a la corrosión, resistencia a altas temperaturas y alta resistencia eléctrica.Por ejemplo, la aleación NiCr 70/30, también designada como Ni70Cr30, Nikrothal 70, Resistohm 70 y X30H70 tiene un punto de fusión de 1380oC y una resistividad eléctrica de 1,18 μΩ-m.Los elementos calefactores, como los tostadores y otros calentadores de resistencia eléctrica, utilizan aleaciones de níquel-cromo.Cuando se producen en forma de alambre, se conocen como alambre Nichrome®.